La fisioterapia es fundamental en el tratamiento de la esclerosis múltiple. Todo paciente diagnosticado de esclerosis múltiple debería ser tratado por un fisioterapeuta especializado en cuanto apareciesen síntomas tales como debilidad , flojera, dificultad de equilibrio , torpeza en gestos y movimientos o dificultad de la marcha. Siendo el objetivo de la fisioterapia mejorar estos síntomas y prevenir su degradación.
El tratamiento debe ser adaptado a cada caso específico en función de los deficits o síntomas del paciente. Por esto, es muy importante encotrar un fisioterapeuta especializado con la reeducación de problemas neurológicos.
Lo ideal, para obtener un beneficio óptimo de la fisioterapia ,son dos sesiones semanales más la colaboración , muy importante , del paciente teniendo éste último que invertir tiempo a diario para seguir las indicaciones y rutinas recomendadas por el fisioterapeuta. La falta de tiempo y el cansancio no deben ser excusas para no colaborar activamente con el fisio.
